En su tercera edición el Programa de Formación Artística para niños, niñas y adolescentes del MEC tiene por objetivo promover más actividades en museos, centros culturales y escuelas rurales. Se realizarán talleres con madres de los alumnos y enc
uentros de facilitadores con actores de la comunidad en torno a la temática derechos culturales. En 2008, participaron 4.000 de todo el país, mientras que el año pasado fueron 12.000.
Al inaugurar un nuevo ciclo del Programa de F
ormación Artística para niños, niñas y adolescentes, el Ministro de Educación y Cultura (MEC), Ricardo Ehrlich, destacó que los escolares con sus túnicas y moñas son todos iguales. No obstante, señaló que los diferenciarán las distintas expresiones artísticas únicas que cada uno aporte con sus capacidades y formas de visualizar la realidad.
Por su parte, el Director Nacional de Cultura del MEC, Hugo Achugar, indicó que con este programa se benefician los museos porque son espacios del pasado y de la memoria, y los niños que son el futuro.
Precisó que en esta propuesta participan distintas organizaciones porque la cultura no es objeto de una sola institución. Señaló que con este tipo de actividades el país apuesta a los niños. En ese sentido, en el evento, niños y adolescentes del departamento de Treinta y Tres presentaron un libro de comic de su autoría.
Asimismo el Director
de la División Atención a Colectivos y Población Vulnerable del Ministerio de Desarrollo Social (MIDES), Yamandú Ferraz, saludó a los presentes en nombre de la Ministra Ana Vignoli. Agregó que "ser uno es importante pero ser parte de miles lo es mucho más", augurando que los niños participantes se sientan así en el transcurso de las tareas que se desarrollarán.
De esta forma, el Director del Área de Ciudadanía Cultural del MEC, Leonardo Rodríguez, indicó que el programa es una forma de vincular a los museos, como centros culturales de la comunidad, con la formación artística a niños, niñas y adolescentes.
Durante el año 2008 se brindó formación a más de 400 niños de escuelas de Montevideo. Asimismo, participaron en ese momento 4.000 niños de todo el país.
En 2009 se amplió la capacidad de trabajo del programa y se llegó a 12.000 niños. En este nuevo lanzamiento se realizarán actividades con más niños y adolescentes, con inclusión de otras actividades que no estaban incorporadas en ediciones anteriores.
Se seguirá trabajando con las madres de los alumnos que concurren a los talleres, en museos, en centros culturales, así como en escuelas rurales de todo el país. Se incorporará también la temática derechos culturales de los niños, niñas y adolescentes.
Igualmente, el Director del Museo Nacional de Antropología, Arturo Toscano, dijo que este es un proyecto movilizador para sus participantes y abre una mayor interacción del Museo con la comunidad.
El Programa Ciudadanía Cultural del MEC promueve la plena participación de los individuos y comunidades en l
a creación, disfrute y distribución de los bienes y servicios culturales.
El proyecto es parte de las actividades que se vienen desarrollando en el Área Ciudadanía Cultural de la Dirección Nacional de Cultura.
Las acciones se realizan en el marco del Programa de Cultura e inclusión social MEC-MIDES y el Proyecto "Viví Cultura" denominado también "Fortalecimiento de las industrias culturales y mejora de accesibilidad a los bienes y servicios culturales de Uruguay", financiado por el "fondo para el logro de los ODM (F-ODM) a través del Sistema de Naciones Unidas (Unidos en la Acción).
Está dirigido a niños, niñas y adolescentes que por distintas razones económicas, s
ociales, geográficas y/o emocionales, que poseen escasas posibilidades de acceso a bienes culturales.
Asimismo, se trabaja con la comunidad promoviendo el conocimiento y la integración de los derechos de los niños/as y adolescentes, coordinando con las distintas instituciones como ANEP, MIDES, Intendencias Municipales, ONGs y museos.
En ese sentido, se desarrollan talleres de formación artística en museos de Montevideo e interior; escuelas rurales; con madres de niños que concurren a los centros educativos; y encuentros de facilitadores en torno a la temática de derechos culturales con los distintos actores sociales de la comunidad.
